Aterrador.
Mas aterrador que el discurso de Macías en la posesión (no diabólica para
tristeza del padre Chucho) de nuestro querido Porky criollo, mas tenebroso que
el hecho que exista la posibilidad de que Jose Felix Lafaurie sea contralor, o
mas aculillante que un simple "es que no me baja" de la novia de un
adolescente resultó la cifra que sacó la
OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económicos) acerca del número de generaciones que se requiere para sacar un
niño de la pobreza. Según esta entidad, que se dedica a promover políticas para
el mejoramiento del bienestar económico y social de las personas alrededor del
mundo (que bonito suena, algo así como lo que hacen los Avengers y la Liga de
la Justicia), en Colombia se necesitan
once generaciones para sacar un niño de la pobreza, algo así como 330
años. Como en los mundiales de patinaje, Colombia resultó ganadora en este
peculiar ranking, en el que logramos superar a potencias como Dinamarca y
Estados Unidos. Según el estudio, factores como la concentración de la riqueza,
la calidad de la educación, la informalidad laboral y la falta de condiciones
básicas de salud, pensiones y servicios básicos hacen que tengamos que pasar
por 82 ciclos legislativos y presidenciales, pagando los correspondientes
salarios de nuestros padres de la patria para que un niño pobre de Quibdó tenga
una vida digna. O sea, en términos coloquiales, cagados y con el agua lejos.
Según el
estudio, uno de los factores claves para revertir esta situación es la
inversión en educación, especialmente en la educación preescolar y a partir de
ahí la creación de trabajos de calidad. Una de las promesas del presidente
Porky fue la inversión en este sector específico de la educación; amanecerá y
veremos, sobre todo porque la ministra del área es tristemente célebre por el
despilfarro de recursos justamente en contratos de alimentación para colegios
distritales cuando era Secretaria de educación en Bogotá. Ojalá que esto haya
sido solo un malentendido, como todos los que rodean a Alvaro Uribe y logren
avances en esta área.
Sin
embargo, es incierta la conveniencia de una mejora en esta área para los
intereses de los copartidarios de nuestro presidente ex modelo de comerciales
de Zenú. Resultaría poco probable que en un país con un alto índice de
educación se pueda convencer a su población que una consulta con propuestas
para combatir la corrupción es dañina para el país, y que en cambio, aquellos a
los que se pretende castigar por su mala conducta, verbigracia los
congresistas, serán capaces de sacar leyes para combatirla, según uno de sus
más honorables representantes por medio de "normas mucho más completas y
que tienen toda la legitimidad". De
eso nos quieren convencer, además de que la consulta es un trampolín para la alcaldía
de Claudia "Cantaleta" López, o que los promotores se harán
millonarios con la consulta, o que es un mal negocio invertir 310 mil millones
de pesos para promover este tipo de iniciativas porque ya existen, o que votar
por la consulta nos va a volver castrochavistas. Todas estas razones
suficientes de muchos para no votarla y dejarle el trabajo de crear leyes para
combatirla y de ejecutar las existentes a nuestros honorables congresistas y
demás funcionarios de gobierno. No se les haga raro que muchos coman cuento, y
la consulta quede como un recuerdo ingrato de lo que pudo ser y no fue.
Para este
humilde proyecto de escritor, una de las razones que no se mencionan en el ya
mencionado estudio es el exceso de corruptela en nuestro país. Ya no está en
sus justas proporciones como dijo alguna vez el extinto ex presidente Turbay.
Seguro que si la OCDE saca algún estudio similar, de cuánto tiempo pasaría para acabar la
corrupción, el número de generaciones aumentaría a 20 o 30.. Ya mucho se ha
hablado del tema, de los casos cada vez más aberrantes y más insólitos que
salen en las noticias, que involucran a TODOS los sectores de la sociedad,
sin importar edad, posición social o económica. Es un mal que se debe
erradicar, así como Amparo Grisales se erradicó las arrugas, o como el ministro de hacienda quiere
erradicar los impuestos a los grandes empresarios. Claramente esto no se acaba
con leyes ni con votaciones, pero la consulta es un comienzo. Hay mucha más
tela de donde cortar. Claramente la educación y la igualdad de oportunidades
van a ayudar también, y ojalá Porky no siga los pasos de su padrino y le
dedique la atención que se merece a este tema. Esperemos, esperemos que en 11
generaciones no sigamos siendo noticia porque Colombia puntea los índices de
pobreza y porque ser uno de los pocos países con Inteligencia Artificial
enfocada al robo de recursos públicos. Seguro para allá vamos.
PD. Por
si no lo notaron apoyo la consulta de la gritona López, a votar Si a las 7
preguntas!