viernes, 4 de octubre de 2019

La guitarra



Ya hace algunas décadas (que viejo me siento diciendo eso), "Los auténticos decadentes" se hicieron famosos con "La guitarra", canción que describía el dilema de un jovencito (como yo por la época) que prefería tocar la guitarra a estudiar o trabajar, tema que entre otras cosas, al parecer influyó la vida de Iván Duque para siempre. Al parecer ese dilema se masificó en los jóvenes de esta época, teniendo en cuenta que hay algo de alarma por la baja en los estudiantes matriculados para educación superior en Colombia. Factores como los precios de las Matrículas, la baja relación costo-beneficio y que los jóvenes no ven necesario educarse una vez empiezan a ganar algo de dinero son la causas de este fenómeno que tiene algo preocupado al gobierno de nuestro querido Porky (como le dice de cariño el jumento que tiene como colega en Venezuela). Tiene razón en preocuparse; los graduados universitarios o de educación superior como este proyecto de bloguero son quienes forman el grueso de la clase media, la víctima predilecta del aparato de impuestos de mí país, de cuyo recaudo se nutre lo más selecto de nuestra macondiana élite (léase con el apellido que se quiera leer, pero para que recuerden: los Arias, Uribe, Lacouture, Lafourie, Nule, Gerlein…)

Como paréntesis, debo reconocer que envidio a las generaciones posteriores a la mía. No sufrieron en el colegio, porque los profesores tienen terror a disciplinarlos por temor a una demanda por daños psicológicos; gracias al reguetón su vida sexual a los 15 ya es tan envidiable como la de Nacho Vidal; pueden convertirse en super estrellas en Youtube promocionando retos y productos y no tuvieron que pasar horas investigando en una enciclopedia o buscando información en bibliotecas por horas, para sacar tareas que ahora salen en 5 minutos con una búsqueda de Google, aparte que conocen medio mundo viajando con lo que les sobra de la mesada. Yo la verdad entiendo a los jóvenes que deciden hacer a un lado la academia y dedicarse a otras áreas de la vida. Si estuviera entre los 16 y 18, edad en la que normalmente empiezan los estudiantes de educación superior, también decidiría no ir la U. Es que viendo los ejemplos recientes, en los que otras habilidades se anteponen a las adquiridas en las aulas, yo preferiría ahorrarme los dolores de cabeza que representa pagar un préstamo del Icetex o evitarle un gasto a mis viejos (en el caso que pudieran pagar los costos absurdos de las matrículas por estos días) y más bien, seguir los consejos de los grandes adalides intelectuales de nuestro tiempo, que encajan perfectamente en el diseño económico del país que nos tocó.

A mí me hubiera podido influenciar Paloma Valencia, quien considera que trabajar con Alvarito (pionero en tantas cosas, como en ser el primer expresidente llamado a indagatoria por la Corte Suprema de Justicia) es equivalente a hacer un doctorado. Para qué invertir años en una universidad, si se puede trabajar para el Uribismo y tener los mismos resultados?. Desconozco en qué área específica se encuentra el mentado doctorado y en qué consistirán las tesis de sus graduados; seguramente Santos logró su grado y su guiño para ganarse la presidencia con "Falsos positivos: Estrategias eficientes para el aumento de bajas en combate", "Mandela" Arias habría logrado su pasantía en una conocida institución federal de la Florida (en las que les encanta el color naranja) con su "Mejoramiento de la agroindustria colombiana a través de subsidios a grandes grupos económicos" y Ernesto Macías con su: "De jugaditas y placas: Estrategias efectivas para combatir el castrochavismo en Colombia". No entiendo  cómo funcionará ese doctorado, ni creo que sea necesario leer o escribir correctamente viendo los trinos de algunos energúmenos uribistas, y sabiendo que las fuentes favoritas de lectura de sus líderes se basan en las noticias falsas de "El expediente" o "Los irreverentes" y los Tweets de Mafe Cabal. Pero doctorado es doctorado y seguramente los elogios de Paloma hacia este peculiar posgrado está haciendo mella en los potenciales estudiantes de nuestro país haciéndolos desertar o ni siquiera empezar una carrera.

Tampoco estudiaría porque, seamos realistas, eso no da plata. Cuántos profesionales conocemos que todavía pagan Icetex,  ganando sueldos bajos y sufriendo la competencia inclemente, tanto de locales, como la que llegó de otros países (sin que suene a Xenofobia por favor). Si no le gusta el trabajo, alguien más lo hará, y más barato. No, no, no, ni pensarlo. Viendo el poderoso discurso y la reacción viral de un famoso reguetonero al comprar su primer avión privado, me convencí que la felicidad se logra solo con dinero y posesiones. Así que como no tengo talento ni para el fútbol ni para el música o la actuación, tendría que buscar otros horizontes y otros ejemplos para lograr ser feliz.  Y qué mejor que seguir los pasos de grandes ejemplos como los Nule, los Moreno o el mismo "Einstein" Arias (como le puso el genio de la economía Alberto Bernal).  Ya es conocida la visión de Gilberto Tobón acerca de cómo funciona realmente nuestro país, así que podría entrar a hacer carrera haciendo parte de esa dinámica. Hay que robar al estado y en grandes cantidades, solo para asegurarse de que, en el caso que lo agarren a uno en su escape a alguna Isla del Caribe, por mal que le vaya termine pagando su condena en su casita de 10.000 metros cuadrados, o viviendo en las difíciles condiciones de la Escuela de la caballería por algunos años hasta que se cumpla la condena (máximo 3 años) antes de salir por buena conducta y seguir mamando de la teta del estado.

Piénselo bien papás, en lugar de gastar sumas millonarias en los Andes, La  Javeriana o el Externado, inviertan en comprar votos. Son como el mercado accionario de nuestros políticos. Miren a "Caída" Merlano, por ejemplo; sí, es cierto, pagó algo de cárcel unos meses, pero el diseño de sonrisa le salió gratis (tal vez a costa de las quimioterapias no autorizadas a sus compañeras reclusas), con lo que asegura una mayor admiración por parte de sus no pocos fans (entre los que se cuentan los Gerlein, los Char y hasta el mismo Tino Asprilla), y con la que seguramente pasará desapercibida ante nuestro ya desprestigiado aparato de inteligencia, al que entre otras cosas, le debemos uno de los mayores osos internacionales gracias a las ya famosas fotos de contexto en la denuncia de nuestro Porky ante las Naciones Unidas. Seguramente una vez termine el escándalo mediático que supuso su ridícula huida, todo se olvidará, se perdonará y la veremos frente a la registraduría cuando uno de los Char termine viviendo en la casa de Nariño (eso si es que no le da frío y termina por llevarse la presidencia a la Quinta de San Pedro en Santa Marta, o se construye un palacio en Barranquilla)

Aparte, los jóvenes de ahora no son tontos, y se dan cuenta que algunos de los líderes más influyentes del momento se pasan por la galleta los hechos demostrados por la ciencia, uno de los grandes pilares de las Universidades. Para qué invertir años en una universidad, en investigaciones acerca del clima, de energías limpias o sobre el futuro de nuestra especie si van a terminar siendo poderosamente rebatidas por un Bolsonaro, quien está convencido que la Amazonía no es vital para nuestro planeta y que puede hacer con ella lo que se le dé la gana por estar en Brasil, o por el presidente Naranja (de piel) quien considera que el cambio climático es una noticia falsa, quien nunca escuchó antes acerca de un Huracán de categoría 5 (ya le han tocado al menos 4 ) y quien en alguna vez sugirió enviar una bomba nuclear a un huracán para bajar su intensidad; o por un Duque a quien le encanta la idea de asperjar un químico que ya está generando demandas masivas en Estados Unidos por generar muertes y a quien le gusta la idea de hacer Fracking, una práctica  ya prohibida en varios países desarrollados. Eso sin contar el auge de los terraplanistas, y los padres que no creen en la vacunación (eso lo dejo para otro post)


Menos mal ya voy para los 40, y aún tengo la idea tonta de que educarse sí sirve y que normalmente es una inversión que vale la pena, eso sí siempre y cuando no sea para volverse un Abogangster con especialización en fiestas sorpresa, u Ortodoncista con énfasis en fugas y escapes (que en todo caso al parecer dejan buenos ingresos). En todo caso hay expertos que consideran que el modelo educativo tiene que cambiar, y volverse más dinámico. Piensen en unos años con carros automatizados, robots que hacen sushi, guerras peleadas con drones, y con la mayoría de trabajos que hacemos ahora reemplazados por inteligencia artificial. Hay quienes dicen que quienes vivan en esa época, deben estar preparados para aprender nuevas profesiones poniéndose al día con los cambios constantes que los trabajos tendrán por cuenta de los avances tecnológicos. Y ahí las universidades y otras instituciones de educación superior van a ser clave. Bueno, eso en un país ideal, en el nuestro tendremos que ver si le conviene a los dueños de la finca, y que no nos toque ver  que esos esos avances les ayuden a generar robots que voten por ellos, o algún algoritmo avanzado para modificar los resultados de una elección, de raro no tendría nada…

jueves, 29 de agosto de 2019

Con el agua lejos?


Escuchar esta mañana la noticia de Iván Marquez anunciando su regreso a la vida militar fue como pensar en ver a la ex volver con el ex al otro dia de haber terminado con ella. Era algo que se presentía, que parecía inminente, pero que nos negábamos a creer hasta no verlo. Volver a ver a las Farc sin la rosita me causó una tristeza horrible, peor que el pago de impuestos de este año con el patrocinio de nuestro buen ministro de Hacienda, y casi parecida a ver quemándose a la Amazonía, así grandes líderes como Bolsonaro y Trump, entre otras personalidades, lo vean como algo completamente normal por estas épocas, eso sí, con la salvedad que hay que dejar de hacer popó todos los días para  ayudar al planeta.

Lo de esta mañana fue la chispa que encendió la polémica de nuestras polarizadas orillas para seguir echándole sal a las heridas que por lo visto se van a tardar otro rato más en cerrar. De la orilla de la izquierda brillaban las intervenciones de quienes culpaban al gobierno del presidente Urib… perdón Duque por hacer lo posible por no cumplir con los acuerdos, del ánimo del Centro Democrático de sabotear todo lo pactado y reversarlos, del ninguneo sistemático a la JEP y de prácticamente obligar a un buen hombre como Ivan Marquez y sus compañeros de lucha a las vicisitudes de la vida del monte y a la tragedia de la guerra. De la orilla opuesta, como era de esperarse, estaban quienes pedían como trofeo el Nobel y la cabeza de Santos y  de paso de toda esa sarta de mamertos castrochavistas que firmaron "ese maldito papel que llaman acuerdo de paz", recordando que el "No" ganó y que en tiempos de Uribe a punta de bala "casi se acaba la guerrilla en Colombia"; fue como el famoso "Le dije" de las mamás colombianas, inmortalizado por Andrés López en su pelota de letras. Como siempre, los colombianos unidos en nuestros odios y nuestras diferencias irreconciliables.

Sin embargo, al ver el video de Márquez anunciando su segunda Marquetalia me llené de esperanza al pensar que se trataba del nacimiento de un nuevo grupo de bufones post modernos buscando viralizarse y hacerse famosos. La fanfarria que parece hecha con una organeta Casio de los 80 con la que empieza el video,  dio el preámbulo al gran comienzo que incluye el fino detalle del ciego con rostro amenazante empuñando un fusil, algo casi tan ridículo e hilarante como los enanitos de "Risas y salsa" y "Jackass"o  el Cerdo de "La Tele". Infundir terror con un tipo que dispara a oído solo se le habría ocurrido a genios como Benny Hill o Chespirito.  También pensé que podía tratarse de algún tipo de metáfora relacionada con la justicia ciega que nuestro intelecto chibcha no logró entender. Eso sí, no pudieron encontrar un mejor actor para el personaje en cuestión, ya lo vimos actuando como comerciante de televisores, enfermo desahuciado, ex - convicto recapturado y ladrón posesionándose en su nuevo cargo como congresista. Un gran comienzo para lo que se venía más adelante.

El señor Marquez, casi homónimo de nuestro subpresidente, con su look hecho aparentemente para rendir un homenaje a Jimmy Salcedo, inició su discurso iniciando por la necesidad de la justicia social en nuestro país, mencionando que las claves de la misma radica en acabar la desigualdad y la corrupción, algo que no deja de ser curioso al provenir  de un tipo que dedicó al menos sus últimos 20 años a hacerse millonario traficando con droga, a secuestrar y a reclutar niños campesinos; eso sí, resultó muy gracioso escuchar su gran argumento defendiendo el hecho de lanzarse de nuevo a las guerra de nuevo para perseguir la paz del país (??), y a la mención de que Santos le hizo pistola a la paz cuando jamás, ni él ni su patiño Santrich  se montaron  en ese barco de los acuerdos.

Pero lo mejor estaba por venir. Dentro de su rutina, en un momento de brillantez y en un vuelco interesante a su acto cómico,  decidió denunciar públicamente a Francisco de Paula Santander por varios delitos… casi más de 200 años después de ocurridos. Entre estos se contaban intentos de asesinato, hechos de corrupción, Fake news y traición a la patria; con seguridad esto ofendió profundamente a la amplia audiencia Santanderista de nuestro país. Es probable que la fiscalía haya tomado nota de estos hechos y caiga con todo para investigar, más ahora que cuenta con tiempo libre de sobra al encontrarle una brillante solución al misterio de los desaparecidos del palacio de justicia.

Eso sí, no podía faltar el mensaje alentador del sketch, en el que advierte que la nueva revolución solamente atacará a la oligarquía, que como sabemos todos, para este grupo como para el Ministro Carrasquilla y la DIAN está representada por todo aquel ciudadano que trabaje y gane más de un millón de pesos al mes. El remate de su invitación a la comunidad LGBT a su revolución fue tal vez una metáfora al hecho de hacerse el no heterosexual con los acuerdos que firmó hace unos años para dedicarse a los negocitos personales de él y sus amiguitos

En fin, esta mezcla de sátira, denuncia histórica y diversidad puede bien ser nominado a mejor video revelación en la próxima entrega de premios en Youtube. Soy de la opinión que en el afán de hacerse famosos, a nuestro nuevo grupo de payasos, el tiro les saldrá por la culata (como cuando Santrich vaya a disparar, quizá). Con su anuncio lograron un rechazo general de todo el país, o bien por hacerle pistola a los acuerdos a los que muchos les apostamos todavía o bien por aquellos que nunca quisieron darles esa oportunidad histórica que tuvieron de reivindicarse con el país al que tanto daño le hicieron y que ahora tiraron a la basura. Amanecerá y veremos, como no puede decir el señor Seuxis Pauxias (tantos chistes que se pueden hacer con él), ojalá no retrocedamos de nuevo por culpa de estos hijueputas, que son tan culpables de muchas de las  desgracias de nuestro país como quienes los originaron hace ya más 50 años (esos tambien otros Hps). A pesar de todo, de lo malo que se ve y dándole el toque cursi a este post,  yo sigo creyendo en que la paz es posible, y que este es un tropiezo mas en ese camino, será que no vamos a ser capaces?

martes, 6 de agosto de 2019

Declaratoria de ignorancia


Me rindo. Despues de andar casi 40 años en este desvencijado planeta, he concluído que mi ignorancia  es mas grande que mis ganas de luchar contra ella. No importaron los años de colegio y universidad que mis padres con mucho esfuerzo pagaron, o las oportunidades de aprender de grandes profesionales en mis años de trabajo, o vivir en una era donde la información está a unos cuantos clic de distancia. Reconozco públicamente que hay cosas que no comprenderé al detalle como sí lo hacen muchos de mis compañeros de especie, seguramente dotados de otro tipo de inteligencia superior a la mía, por lo que solicitaré su iluminación para ilustrarme y guiarme por el camino del entendimiento en los siguientes misterios que son de difícil comprensión para mí:


  1. Que el derecho a tener armas  en Estados Unidos es sagrado e inviolable y que el mismo no tiene nada que ver con los cientos de matanzas que ocurren en este país. Que el regreso del rey de Inglaterra a invadir a esta potencia mundial es inminente, por lo que todos sus habitantes deben estar armados y preparados para defenderse de este enemigo común cuando aparezca.
  2. Que criticar al actual gobierno de Colombia,  y a la clase que ha dirigido a mi país por dos siglos convierte a las personas automáticamente en aliados del castrochavismo y del petrismo y que criticar al petrismo y a la izquierda convierte a las personas automáticamente en Uribistas.
  3. Que un sistema económico  que permite que el 1% de la población tenga más recursos que el 99% restante es el mejor posible para nuestra evolucionada especie.
  4. Que la Amazonía es inútil y hay que tumbarla para promover la industria ganadera y así disfrutar todos los beneficios económicos y ecológicos que esta trae.
  5. Que el narcotráfico se acaba a punta de plomo y de glifosato, y que el glifosato es beneficioso para la salud.
  6. Que Nicolás Maduro es el mejor estadista conocido hasta hoy,  que los millones de venezolanos que migran aún no logran comprender las bondades y ventajas de su gobierno y que la hiperinflación, los apagones y su estancamiento económico son producto del imperialismo yanqui.
  7. Que Andrés Felipe Arias no se robó un solo peso, y que existe un complot que incluye a Estados Unidos, las altas cortes, y los organismos de control para hundirlo.
  8. Que Ernesto Macías se merecía la cruz de Boyacá por su trabajo como colombiano ejemplar. Su demostración de que no es necesario estudiar sino saber a qué árbol arrimarse y hacer jugaditas sucias contra sus oponentes son la inspiración para muchos de mis compatriotas.
  9. Que el feminismo se reduce al lenguaje inclusive,  exterminar a los hombres y tener la cuca y las axilas peludas .
  10. Que el mejor modelo de desarrollo para los países del tercer mundo no es invertir en educación sino seguir explotando sus recursos naturales para entregárselos a los países de primer mundo, que sí invierten en educación y saben qué hacer con ellos.
  11. Que los recursos naturales son ilimitados, que el calentamiento global es una ficción de los científicos y los demócratas gringos y que es mejor tener más perros, gatos y vacas  que todos esos animales salvajes que no contribuyen en nada para la economía.
  12. Que la diversidad se reduce a lo LGBT y que en ese costal no deben ser incluidas las comunidades indígenas, las minorías culturales o los grupos de personas con habilidades diferentes.
  13. Que los resultados del gobierno de Duque en su primer año son responsabilidad de Santos.
  14. Que el HP de Santrich se haya volado con sueldo de congresista porque ni la JEP ni la Fiscalía se pusieron de acuerdo para procesarlo.
  15. Que un candidato Independiente, con los apellidos más proclives a los chistes más desalmados y  apoyado por el partido de gobierno y dos de los partidos más corruptos del país es lo que Bogotá necesita para los próximos 4 años.
  16. Que le tengamos que financiar un mal negocio al hombre más rico de Colombia
  17. Que cualquiera tenga espacios para escribir pendejadas y que las pueda publicar en las redes sociales y sobre todo… que haya personas que saquen tiempo para leerlas.

miércoles, 15 de mayo de 2019

El "Patriota"


No podia dejar pasar otro acontecimiento que refuerza el realismo mágico de nuestras macondianas instituciones para volver a torturarlos con mis escritos. Finalmente, y contra todo pronóstico (así como la eliminación del Barcelona y del Ajax de la Champions League) el fiscal renunció. Indignadísimo  porque la JEP le pasó por encima, el buen hijo del maestro Salustiano decidió renunciar vaticinando una pronta destrucción de las instituciones gracias al ya cuestionado organismo de justicia transicional. No fueron las marchas, no fue el hecho que tenga conocidos conflictos de intereses por haber defendido a grandes poderes económicos (Caso Mattos, Odebrecht, Sarmiento-Angulo) para luego tener que investigarlos, ni su descarada persecución contra sus detractores, o sus teorías extrañas para explicar crímenes inconvenientes para los intereses de algunos. No, fue la no extradición de un líder exguerrillero la que le cayó como anillo al dedo para llenarse de indignación (cosa que no sucedió en los ya mencionados casos) e irse del ente acusador. Qué conveniente, salir como un héroe impoluto, seguramente a seguir con su carrera triunfante hacia la Casa de Nariño después de que nos hiciera quedar en ridículo frente a los otros países de la región que sí fueron capaces de perseguir a los untados por la mafia Odebrechiana.

Por otro lado esta Santrich, ese maléfico personaje que se burlaba de sus víctimas cuando se le preguntaba si estaba preparado para pedir perdón con su "quizás, quizás, quizás". Este man representa uno de los sapos feos que nos tuvimos que comer para firmar los acuerdos (de los que quienes lo apoyamos estábamos conscientes). Si le tendieron una trampa o si en realidad seguía delinquiendo, no lo sabremos, conociendo cómo funcionan las entidades estatales. Si lo hizo, cosa que podría ser probable pero igual sospechosa conociendo como salieron las pruebas de la fiscalía de nuestro guasonesco Fiscal, que le caiga la justicia con toda y que cumpla. No creo que suceda.

En todo caso, y siendo maliciosos, esta parece una situación gana-gana, de esas que dividen la opinión pública, pero que resultan convenientes para los involucrados. Por un lado el invidente ex - líder guerrillero evitó irse extraditado a Estados Unidos(en donde probablemente hubiera podido dar información de rutas, sapear y lograr el sueño americano como otros narcotraficantes), y por el otro nuestro polémico ex - fiscal se posicionó como un adalid de la dignidad y la justicia, alistándose para las presidenciales de 2022 como siempre ha sido su sueño. Una situación que seguramente no se le hubiera podido ocurrir a David Benioff o D. B. Weiss viendo lo ocurrido con la última temporada de GOT.

Por fin se cayó el fiscal, dirían unos. Tendremos justicia con los casos en los que él se hizo el loco, o se encargó de dilatar o de enterrar, dirían otros… Error!!! Recuerden que el Presidente escoge la terna. Y acuérdense que el presidente no es el que hace cabecitas en el Bernabeu o toca guitarra con Maluma, sino el de los Crocs, el Twitter humeante de odio y reconocido fan de la guerra, como lo aceptó recientemente. Así que vendrá otro defensor de los intereses de los más poderosos y nos quedaremos sin saber porqué las denuncias del Contralor de la Ruta del Sol se quedaron en nada, en cómo Mattos arreglaba jueces para salir de sus líos judiciales, cómo se llenó la botella de agua de cianuro en el caso Pizano y tantas otras preguntas que nos quedaron abiertas con la salida de nuestro "Impoluto, digno y probo" exfiscal. No se les haga raro que Abelardo de la Espriella termine en el la oficina principal del bunker de la fiscalía, en donde podremos degustar diariamente sus exquisitos trajes color pastel, sus sombreros, y su voz digna de participación en la sección de bloopers de los concursos de talentos tan de moda por estos días.

PD. La amenaza de Montealegre a los Uribistas suena tan mal como la salida de Martinez. Si sabía que Uribe es responsable de las mentadas masacres paras, por qué no hizo lo que tenía que hacer cuando estuvo en la fiscalía?? Mas circo para el pueblo, eso sí de mejor calidad que la temporada final de Game of Thrones.

martes, 26 de febrero de 2019

Una empanada para el Oscar


Como buen simpatizante del séptimo arte, ver los Oscar me entretiene, aunque esta vez mi aversión a tener cable ($$) me obligó a seguirlos por relatos escritos en internet y a través de mensajes de texto con mis media naranja y mis amigos. Ver las películas nominadas, apostar por las ganadoras e improvisar como crítico de cine siempre será divertido para muchos adultos contemporáneos como yo; es como jugar a ser periodista o al analista político, en lo que son expertos Claudia Gurisatti, Ernesto Yamhure, Gustavo Bolívar, o el bien recordado Juan Pablo Bieri (que será de ese señor, seguro ya está alistando maletas para alguna embajada) . Este año, debo reconocerlo, me quedé corto y no pude ver varias de las nominadas, aunque en todo caso tuve material para alguna conversación con mis amigos y compañeros de trabajo. Al igual que en otros años, hubo polémica, una que otra sorpresa y un enfoque cada vez más politizado, cosa que tal vez debamos agradecer a la extraña forma de gobernar del emperador naranja; de todos modos, por las razones que sea siempre será chévere ver hispanos, afroamericanos, musulmanes, Indígenas, y otros grupos ignorados por la academia hasta hace algunos años,  como ganadores, o al menos como protagonistas de la contienda. Curiosamente, los premios cinematográficos del país de la libertad, la igualdad y la democracia, se acordaron que hay mas colores de piel, mas religiones y más formas de pensar en el planeta casi 80 años después de creados.

Debo reconocer que me gustó que ganara "The green book", aunque repito, tengo como tarea ver el resto de las nominadas. Lo de Roma fue, en medio de todo, merecido para una película que a mi modo de ver es el equivalente a salir con una mujer del físico de  Emily Ratajkowski con la capacidad conversacional de los perezosos de Zootopia. Pero bueno, es la opinión de alguien al que le gusta el cine de superhéroes, los salpicones de sangre y los diálogos entretenidos de Quentin Tarantino, y las habilidades histriónicas de Esperanza Gómez o de Mia Khalifa (los que no la conocen, la hija no reconocida de Gustavo Petro). En fin, hay que estudiar cine unos años para entenderla, apreciarla y ponerla en el pedestal que la pusieron (a Roma, no a Mia) y para comprender porqué muchos pegaron el grito en el cielo al no ganar la codiciada, gringa y calva estatuilla dorada entregada anoche. Sin embargo,  hay algo que comparten esta apología Cuaronesca al bostezo con la ganadora, y es que nos sitúa en momentos históricos no muy lejanos en los que ocurrían cosas que consideraríamos abominables y poco fáciles de digerir en estos días. 

No les voy a Spoilear la trama de "The Green Book", sería tan horrible como si les contara que al final de Bohemian Rhapsody el protagonista muere por complicaciones relacionadas con el SIDA.  La película describe de alguna manera la  forma como eran tratados los afroamericanos en las épocas de la segregación en el sur de los Yunaits en los 60. Si, en esos mismos Yunaits que claman por la libertad en Venezuela, por la democracia en el medio oriente y por el respeto de los derechos humanos en el mundo, hace no más de 60 años  obligaban a las personas descendientes de Africanos a educarse, vivir, comer y hasta cagar en sitios diferentes a los de los blancos "nativos de America", eso sí solo en algunos estados sureños. 60 años no son nada, y resulta difícil de digerir que por la época de los Beatles, cuando muchos de nuestros papás daban sus primeros pasos, había lugares específicos para "colored people", algo inimaginable por estos días. Parte de lo que muestra Roma es parecido, más reciente, más familiar y todavía más deprimente;  nos recuerda las épocas donde las familias de clase media y alta tenían su empleada interna (entre esas la mía). Una práctica normal en la que una niña de unos 15 años era llevada a la gran ciudad desde algún pueblo de cualquiera de nuestros países latinos para trabajar en una casa las 24 horas del día (excepto domingos) a cambio de un pequeño salario, techo (en un cuarto que parecía el closet donde vivía Bender, el de Futurama) y comida. Si le contamos eso a un niño de 10 años, tal vez no encontraría la diferencia entre eso y el concepto de esclavitud, guardadas algunas proporciones. En estas épocas resulta absurdo pensar en que esas prácticas eran cotidianas hace algunos años, y no cabe en la cabeza de la gente del común que eso pudiera suceder en la actualidad, a no ser que sea German Vargas Lleras, acostumbrado a disciplinar a los coscorrones a sus subalternos.

Tal vez en algunos años pase lo mismo con lo que estamos viviendo actualmente y que si bien nos sorprende al principio, terminamos por acostumbrarnos; tal vez nuestros descendientes se escandalicen con nuestras prácticas y nuestras costumbres. Tal vez hagan una película acerca de la terrible época en la que la Policía Nacional perseguía a los transeúntes para multarlos por valores equivalentes a su salario mensual, en algunos casos, por comprar empanadas en la calle, o por correr en el terminal para que no los deje el bus. O del momento histórico en el que teníamos dos presidentes y como uno de ellos se encargaba de resolver los problemas internos del vecino Venezuela, mientras el otro andaba a caballo y gobernaba a través de Twitter, rudimentaria herramienta de comunicación de las décadas de los 2000 y 2010.

Quizá en 40 años los hijos de los valientes que decidieron ser padres se pregunten cómo sobrevivimos al aire irrespirable de Bogotá, sentirán curiosidad de cómo nos empacábamos en unos buses rojos que echaban humo negro y cancerígeno para transportarnos y cómo es posible que aún la ciudad por esos tiempos no tenga metro eléctrico como las bellas ciudades de Pasto, Pereira o Ibagué. Los hijos de mi sobrina verán con extrañeza que en nuestros tiempos llenábamos contenedores de basura con los plásticos y los empaques de las cosas que comíamos, los mismos que terminaron en el mar para formar islas a las cuales ellos van de vacaciones para ver hologramas de ballenas, aquellos magníficos animales extintos por la ingesta de plástico, que algunos candidatos presidenciales observaban para masticar su derrota mientras todo ardía a su alrededor. 

No entenderán como un ex millonario, de piel anaranjada,  estrella de un reality  y  que luce con orgullo un gato muerto en la cabeza se volvió el presidente de la nación más poderosa del planeta, ni como un tipo que dice hablar con los animales en pleno siglo 21, logró convencer a 30 millones de personas que aguantar hambre está bien, y que todos sus problemas son causados por un malvado ente externo llamado capitalismo mientras él come filetes de 500 dólares. Es posible que se confundan cuando vean que a finales de los 80 el "mundo libre" tumbó el muro de Berlín, un suceso igual de importante al famoso concierto de Cúcuta de 2019, para después ver que el presidente del "país de la libertad" por excelencia construía un muro para separarlo de sus indeseables vecinos del sur. No entenderán porqué en nuestros tiempos se intentó meter a la fuerza unos contenedores con ayuda humanitaria a través de la frontera con Venezuela, en lugar de solicitar esto a la Cruz Roja,  con años de experiencia en estas situaciones.

Tendrán muchos interrogantes de cosas que a ellos les parecerán absurdas para esas épocas. Nuestra manía de tomarnos fotos a nosotros mismos estirando la boca, cómo le regálabamos nuestra información a una empresa gigante para usarla con fines comerciales y políticos,  cómo en estas épocas nos clasificábamos entre Uribestias y Mamertos y nos matábamos por la camiseta de nuestro equipo de fútbol.

Quien quita que por esas épocas el mundo sea mejor de lo que conocemos actualmente. Que no sea la distopia que nuestros actuales gobernantes se empeñan en implementa; tal vez el camino que ellos están trazando sea el adecuado, que el calentamiento global en serio sea un cuento reforzado de unos científicos diabólicos, que el Fracking que hasta ahora es exploratorio en Colombia purifique las fuentes de agua y que Hidroituango provea de energía eléctrica a toda Colombia, cosa que sería probable si alguna vez empieza a funcionar y si nuestros gobernantes siguen empeñándose en usar tecnologías de hace 30 años para transportarnos. Con seguridad nuestros descendientes se reirán de nosotros y mirarán nuestro estilo de vida como algo extraño así como nosotros vemos con extrañeza los letreros de "colored people", o las casas antiguas que tenían "el cuarto de la muchacha".

jueves, 31 de enero de 2019

La tierra del olvido


Debo reconocer que soy fan de Carlos Vives. Ya con casi 40 años me resulta difícil cambiar de gustos musicales, sobre todo cuando la música de él ha acompañado a mi generación por años, y a que los mayores representantes de la música local en la actualidad son Maluma (actualmente en lo que muchos esperamos sea un retiro permanente de la música), J Balvin y Alzate. “La tierra del olvido” es sin duda una de sus canciones más famosas del samario, tal vez con el nombre mas acertado para describir la tierra que me vio nacer. Y es que mientras otros países parecen aprender de su historia para avanzar y seguir creciendo, nuestro Macondo sigue igual, y nos siguen haciendo las mismas, con los mismos protagonistas de fondo normalmente.

En mi tierra todo se olvida mas temprano que tarde. La indignación temporal es el deporte nacional junto con la corrupción, y sí, el futbol y el ciclismo. Nuestro Alzheimer colectivo ha dado para todo a lo largo de los años. Ha convertido expresidentes en símbolos religiosos, ex-sicarios en estrellas de las redes sociales, ex-periodistas en censores, mascotas en presidentes, vendedores de buses en alcaldes, corruptos en mártires, ríos en barrizales y selvas en potreros disfrazados de desarrollo.

Ahora todos hablamos de Odebrecht y su serie de eventos desafortunados, que tienen al fiscal en la cuerda floja, de la que lo más seguro es que salga bien librado para un puesto diplomático antes de volver al país y lanzarse como alternativa para el cambio en la presidencia de la república. Pero alguien se acuerda que hace menos de un año estábamos hablando de Hidroituango[1] y las fosas comunes que sus aguas se llevaron y con estas las esperanzas de saber que pasó con cientos de desaparecidos enterrados en esa zona? O tal vez recordarán que hace mas o menos tres años hablábamos de Reficar, el escándalo mas grande de corrupción del país en ese momento, de donde no se supo quién pagó cárcel, o quienes se quedaron con los mas de 4000 millones de dólares que se robaron, suficientes para llenar de carreteras nuestra quebrada geografía nacional? Y hablando de eso, donde estarán las carreteras 4G por las que el gobierno de nuestro Nobel de paz vendió Isagen, la gallina de huevos de Oro de nuestras compañías estatales? Que vaina acordarse que por el carrusel de la contratación los Nule andan disfrutando de las desgracias de una casa por cárcel en el exclusivo barrio Golf de Barranquilla[2], en donde quien sabe, de pronto mueven sus influencias para que los servicios de su reclusorio los paguen nuestros impuestos. Ya que tocamos el tema de impuestos, qué pasó con los que salieron untados con lo de Panama Papers? Ya sabemos que uno de ellos se volvió ministro de hacienda, del que a propósito no se volvió a escuchar nada sobre sus jugosos ingresos con el cabezazo de los bonos de agua de los que hablábamos hace algunos meses. Y hablando de Agua, cuándo será que le van a instalar acueducto a las viviendas de 3,6 millones de personas y alcantarillado a otro poco mas de 5 millones[3]? Si la cifra no les dice nada, los invito a convivir con 3 millones de personas sin bañarse por una semana o a estar en una ciudad de 5 millones de habitantes sin baños funcionales a ver si se les abre un poco el apetito. Y hablando de apetito, que habrá pasado con las pechugas de 40.000 pesos que se servían, no Harry Sasson ni en Criterión sino en los comedores escolares de varios colegios públicos de Bogotá[4], habrá pasado algo?
Y así podemos estar por horas hablando de hechos relativamente recientes; los más jóvenes no sabrán del Guavio, la joya de corrupción de los 90, una hidroeléctrica que costó un 340% más de lo presupuestado. por la que nadie pagó cárcel[5] y por la que me quemé las pestañas, literalmente, por andar haciendo planchas a la luz de una vela porque no había luz para tanta gente y tocó racionarla. Solo unos pocos recordarán que hubo expertos que lograron que el único metro del país (en serio, que vergüenza) haya costado lo mismo que la ruta del sol, al parecer con todo y sobornos [6]. Y solo nombrando más casos y más implicados se me podrían gastar mas de las 1500 palabras que debería usar en este escrito: Interbolsa, Foncolpuertos, Saludcoop, Fidupetrol, Cartel de la hemofilia, Cartel de los locos, Proceso 8000, Falsos positivos… en fin la lista es larga y los responsables juzgados y castigados, pocos, muy pocos.

Estos son los casos famosos y destapados, habrá otros esperando el momento políticamente perfecto para explotar. Pero hay cientos, o tal vez miles de estos que ocurren a diario pero a menor escala: el vecino que aprovecha el descuido de la cajera para robarse las vueltas de más, el papá que le hace las tareas a su hijo y regaña a la profesora por corregírsela, los que le cascan a su esposa cuando llegan borrachos a la casa, los que se hacen los locos con la pensión alimentaria, los que meten billetes falsos, los que sobornan al policía para que no lo multe, los estudiantes que copian o los trabajadores que usan el computador de su oficina para escribir entradas en su blog personal.

¿Será que esto cambia? Yo no creo que vaya a vivir para ver semejante cosa, aunque puede ser que los hijos de los valientes que se atrevieron a ser padres lo logren. ¿Habrá algo que podamos hacer? A mi me gusta pensar que la educación tiene algo que ver en todo esto y que puede llegar a ayudar. Que aprovechar las ventajas de tener un mundo conectado van mas allá que subir una selfie en Instagram todas las mañanas y que en su lugar se puede aprender y empezar hacer las cosas diferentes. Que agarrar un libro puede ayudar más que ver un reality o pegarse de Facebook.  Que en lugar de echarle la culpa a los rolos, a los paisas, a los costeños o a los venezolanos de lo que pasa podemos aprender a trabajar con ellos y a echarnos la mano, porque al final, aunque suene a cliché, somos todos la misma vaina, unos simios despoblados de vello corporal con cerebros hiperdesarrollados. De pronto así aprenderemos a no olvidarnos de lo que nos pasa y así evitar seguir eligiendo futbolistas y magos frustrados para dirigir nuestra finca tercermundista.



[1] https://www.eltiempo.com/colombia/medellin/hidroituango-inundaria-tierras-con-cuerpos-de-desaparecidos-182934
[2] Revista semana: https://www.semana.com/nacion/articulo/guido-y-miguel-nule-consiguen-beneficio-de-casa-por-carcel/474975
[3] https://www.elespectador.com/economia/lo-que-falta-en-suministro-de-agua-y-alcantarillado-en-colombia-articulo-802501
[4] https://www.eltiempo.com/justicia/investigacion/sobrecostos-en-programa-de-alimentacion-escolar-en-colombia-153590
[5] https://www.semana.com/nacion/articulo/mucho-ruido-mucho-absuelto/21384-3

jueves, 24 de enero de 2019

Sancocho de Jueves


Todavía no se quita el mal sabor de boca del atentado de hace ocho días. Y no solo por la muerte de más de 20 personas en un acto horrible "a las espaldas" de los líderes del ELN (como para ponerse a tono con la expresión favorita de los dirigentes de mi país), sino por todo lo que este lamentable hecho desató. La camioneta todavía echaba humo y se empezaban a contar los muertos cuando el jefe de nuestro aprendiz en la presidencia ya aprovechaba el momento para culpar al proceso de paz con las FARC (la far, para que me entiendan sus seguidores). Otros sospechaban que aquella bomba fue un autoatentado para desviar la atención de lo de Odebretch (no lo fue, pero sí que desvió la atención, gracias Elenos). Y por supuesto, la marcha para rechazar el terrorismo (sí, otra más) pero esta vez con un tinte inverosímil de intolerancia y violencia en su interior. Es que sí, en mi país se hacen marchas por la paz donde la gente elige no marchar con miembros de este u otro movimiento, o en las que se gritan arengas para que vuelva la guerra y no se negocie, o que simplemente amenazan con "pelar" (sea lo que sea que signifique, a mí me suena a vocablo sacado del léxico de Popeye) a los asistentes que no cuentan con el código de vestir apropiado para la ocasión.

Al ex abogado (?) de Aval le vino bien el evento; sin que suene a teoría conspiratoria, posó para la foto horas después del atentado con resultados en tiempo exprés acerca del autor del atentado, el origen del carro, y los posibles responsables del crimen. Un funcionario ejemplar al que las extrañas circunstancias no le han permitido terminar con éxito su investigación del escándalo de corrupción más sonado de latinoamérica en varios años (así suene redundante en nuestro país, campeón en este tipo de eventos).  También quienes querían ver las negociaciones rotas estarán complacidos de saber que su sueño se cumplió, y que como diría el personaje aquel del sombrero aguadeño de la marcha, "Plomo es lo que viene, plomo es lo que hay, no hay negociación". Obviamente, el descaro de los Elenos es fuera de toda dimensión, al calificar este como un acto de guerra cuando a quienes mataron eran  estudiantes y aspirantes a servir en la Policía, en una situación lejos de combate, y fueron quienes en definitiva, desataron la ruptura de las negociaciones.

Y mientras todo esto pasaba… y mientras todos estábamos ocupados viendo por enésima vez como nuestros vecinos tratan de sacar de Miraflores al señor Maduro, reencarnación falta de neuronas de Chávez ahora con poderes para viajar en el tiempo, siguen saliendo testimonios en el caso Odebretch, El fiscal sigue sin responder porqué manda pruebas incompletas a la comisión de acusaciones (o de absoluciones en la práctica), no se sabe qué mató a Pizano, y quién mató a su hijo o porqué se puso de moda el cianuro a finales del año pasado. Tampoco se sabe qué pasó con el puente de Chirajara, ni quien está matando a los líderes sociales.

La cereza en el pastel ocurrió hoy con el escándalo de Bieri y de Hollman Morris. El saliente gerente-censor aún tiene mucho que aprenderle a sus mentores acerca de cómo mentir y salir airoso, y se convierte así en la primera baja por escándalos del gobierno del Pasante Duque (esperemos muchas más si sigue el ejemplo de su jefe). Si no han hecho el ejercicio, háganlo, escuchen las grabaciones en las que negaba la censura a Santiago Rivas por salir criticando la ley TIC y luego escuchen la de la famosa reunión en la que el insiste fue chuzado y no quería decir lo que dijo porque estaba enojadito, es para morir de risa, de indignación y de miedo de cómo un mentiroso compulsivo puede llegar alto por sus buenos contactos; es que si eso ocurre en un asunto de menor importancia, como sacar de la parrilla un programa en una represalia infantil contra alguien que no piensa como su patrón, como serán otras instancias del gobierno donde se cocinan asuntos más trascendentales (léase impuestos, regulaciones, investigaciones, etc). Y lo de Hollman Morris es la tapa, qué coincidencia que justo en época de elecciones salgan a decir que es un drogadicto, borracho y que esté demandado por violencia intrafamiliar; no lo defiendo, pero no deja de ser curioso que esto pase en épocas electorales.

PD. A ver quien queda como técnico de la selección, esperemos que no venga la temporada de vacas flacas con Queiroz, quien no fue capaz de ganar nada con el Madrid de los galácticos. Amanecerá y veremos…

PD2. Para Facebook, los atentados terroristas en Colombia (igual que en Palestina, Siria, y demás) no son merecedores de la famosa banderita en la foto de perfil. Cuestion de estratos en redes sociales, supongo...