miércoles, 4 de abril de 2018

El verde que nos interesa (a propósito de Ecopetrol y Lizama)


Que pena que el tema esta medio trasnochado, pero me ando pondiendo al dia, ya luego escribiré de temas mas trascendentales, como la donación de canas que le hizo el Dr Uribe a Ivan Duque para puntear en las encuestas.

Para todos es una infamia lo que paso en Santander con el tristemente célebre pozo Lizama 158. 550 barriles de petroleo, 2400 animales muertos, más de 20 familias desplazadas, una mancha de mas o menos 20 km (a ver si Ecopetrol no se anima a promover una media maratón para sacarle el jugo a esta cagada "Carrera de Iguana negra" podría llamarla) y un estimado de 30 años para recuperar el ecosistema. Ya se ha dicho mucho del tema, y la verdad si es que Pirry no lo saca, tal vez Ecopetrol podría estar pensando en promover una maratón completa siguiendo la linea de la mancha que se hubiera formado. La explicación del presidente de Ecopetrol sonó como la excusa de los niños cuando lo ponen a cuidar la leche que está hirviendo, "Ehh si, la mancha empezó chiquita, por eso no hicimos nada y de repente nos volteamos y pum, estaba en el agua!!! Las cosas de la vida no?"

 Todos tenemos miedo  de que esto vuelva a pasar en alguno de los pozos abandonados a lo largo del país… es que muchos nos imaginamos el cierre de esos pozos en una escena como estas:

  • Marica, cerró bien la llave del pozo?
  • Si señor si la cerré
  • Le echó candado?
  • Si ingeniero, tocó con el del locker porque nos quedamos sin presupuesto, pero ahí quedo bien, lo reforcé con una guaya de una chumacera del tractor que cambiamos la semana pasada, eso ahí queda bien, fresco no se preocupe.
  • Ok, buen trabajo.

Eso sin contar las tragedias ambientales que tal vez no nos han contado y que igual han afectado en menor proporción esa manchita verde que nos regaló la repartición de tierras de la colonia. Y lo del Fracking? Se ve super peligroso que estemos tropicalizando métodos de extracción gringos sin saber las consecuencias que puede tener.

Limpiar una mancha de petróleo no es como arreglar un apartamento después de una rumba, lo que nos da para pensar en qué condiciones estarán esos sitios donde nuestras desmovilizadas y ahora "bien portadas" FARC , que en un acto de protesta y de reivindicación del pueblo colombiano, decidieron explotar esas tuberías imperialistas y capitalistas tirándose todo lo que tenían a su alrededor. Pueden pasar hasta 100 años para que esas zonas se recuperen (teniendo en cuenta que en algunos casos se derramaron hasta 45.000 barriles) tiempo en el que tal vez se vea finalizada la primera linea del metro de Bogotá.

Y la minería? Legal e Ilegal? Cuánta agua envenena? Cuanto suelo erosiona? Cuanta montaña se come? Varios de nuestros candidatos presidenciales ven como la ventana del progreso esta actividad (Según ellos de forma responsable) haciéndose los de las gafas con el hecho de que esta vaina solo trae más pobreza aparte del daño ambiental que genera. Y la tala de árboles para darle mas pastico a las vaquitas? O para sembrar palma de cera? Y los negocios que funcionan mandando loritos encaletados a algún niñito rico (de verdad no como Hernando Zabaleta) de Dubai?

Todo esto nos da pistas del verdadero verde que le gusta a buena parte de nuestra "civilización". No es el verde ecológico de la iguana de Ecopetrol, ni del aguacate, tan famoso por estos días, ni del Nacional (gracias a dios). El verde, o más bien los verdes, que nos gustan les permite a  los políticos comprar tamales en cantidades industriales para atraer votantes, a los grandes empresarios medir su éxito, a los equipos de futbol comprar estrellas por sumas exhorbitantes  y a la gran mayoría de esta raza de primates sin pelo corporal (a no ser que sea una estrella porno de los 70), nos sirve para subsistir de una manera decente.

No se comen, no sirven para vestir (a no ser que se use muy bien la imaginación y se hayan cambiado por  Bolívares fuertes) pero vivimos en función de ellos y siempre buscamos tener más y así cambiarlos por bienes o servicios que muchas veces no necesitamos.  Que el carrito último modelo, el último teléfono que saca selfies con solo picar el ojo, los zapatos de piel de cocodrilo. Esa necesidad por los verdes, en algunos casos obsesiva, tal vez puede estar haciendo que el verde que importa se nos esté acabando. Será que le conviene a los grandes magnates del petróleo que se saquen autos eléctricos, se encuentren nuevos materiales que no requieran del oro negro, o nuevas forma de energía no contaminante? Será que a ellos les importa que se dañen fuentes subterráneas de agua por el fracking, o que se manchen 20 km de un río que nunca visitarán?

Será que a los dueños de las grandes empresas de productos de consumo masivo están interesados en que volvamos a comprar alimentos no procesados,  a comer cosas sin empaques (que entre otras cosas se vuelven basura al instante que se utiliza el producto que contienen), a usar pañales de tela o a cargar una botella de agua para llenarla con agua de la llave? O las empresas de hardware estarán interesadas en hacer dispositivos que duren 10 años y que no requieran cambiarse cada año cuando al gerente de mercadeo le da por sacar el mismo teléfono con un color atractivo para los milennials?

Es obvio que nuestra especie es destructiva; desde que andamos por acá hemos acabado con miles de especies. Los animales salvajes se han venido reemplazando progresivamente por perros, gatos, vacas, marranos y ovejas, la flora salvaje por maiz, trigo y palma de cera. Y la tendencia sigue… y la verdad no nos interesa mientras haya algo bueno en la televisión, haya comida en la nevera y el carro tenga gasolina. La verdad es que a la naturaleza le importa poco. Tal vez terminemos desapareciendo inundados  por un alud de basura, aire irrespirable o agua llena de químicos, pero en un par de millones de años (que son unos pocos minutos para nuestro querido planeta) todo se renovará y aparecerá otra especie dominante, tal vez un poco mas decente y mas inteligente que esta plaga que representamos.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario